Los últimos minutos de mediocridad.



El último día del 2010 refleja perfectamente el año, todo está absolutamente triste e insaboro, las calles están cubiertas de gris, como casi todos los dias del año, con un aroma a fracaso que siempre llena esta hora de la mañana, un vaho impregnado en toda la gente que ,derrotada por la vida y el sueño se encuentra colocada en las aceras como cadáveres regados alrededor de un interminable cementerio. Las calles sucias, el humo acompañado por el tremor de los carros viejos y el viento que no es fresco y mucho menos revitalizante, sino más bien molesto son lo único que hace que la mañana tenga vida.

Este año, ha sido un año de peleas, de batallas inexplicables, de guerras perdidas y luchadas a medias. Lo que me queda luego de 12 meses de un año bastante mediocre, de un año mezquino en cariño y agrio en situaciones con un gran número de decepciones y sin sabores, es un montón de cicatrices, que bien puedo interpretara como experiencia, un vació que se ha ido llenando a medias con polvo, placebos y enojo, un montón de trabajos sobresalientes y extremadamente bien pensados y un número menor de trabajos improvisados y redactados entre el estupor del sueño y el stress de la falta de tiempo, un pequeño ejército de ideas y proyectos incompletos por la crueldad del tiempo y la constante falta de dinero.

A pesar de todo este año me enseño dos cosas, la primera, que las personas adecuadas llegan en el momento menos esperado y la segunda es que a veces es necesario entregarse al salvajismo a la naturalidad de las cosas y el ardiente deseo de ser un espiritu libre. Como decía, este año me entrego la satisfacción de conocer a un gran número de personas que se unieron a la lista de personas que hacen mis días felices, gente que se ha encariñado conmigo y ha forjado lazos que no esperaba forjar tan rápidamente. Gente que se ha ganado a pulso, y paciencia, mucha paciencia un espacio en mi corazón, re descubrí personas y conocí gente que nunca creí conocer, que me han regalo dibujos, tiempo, atención y risas, que me han despertado el día de mi cumpleaños atentando contra mi privacidad, extrañas personas que me han escuchado en medio de los destrozos emocionales y el constante deseo de lanzar todo por la ventana y rendirme, gente que me ha susurrado al oído palabras de afecto y que me ha enseñado a hacer y deshacer cosas que estaban mal hechas desde un inicio. Me enrede en romances que no fueron a ningún lado, intente rescatar ahogados y hacerme el mártir prendiéndome fuego con los restos de un amor decadente y sueños a medio arder, y aunque sabe a tiempo perdido, con todo esto aprendi a encontrar mis limites.

No soy, bajo ningún concepto un héroe, soy más bien un ser mezquino, pervertido y depravado, una especie de animal que ha empezado a cazar por los diferentes pastizales. La cantidad de adversidades con las que he peleado este año me han vuelto un personaje incluso más agrio y sombrío, una especie de apostador, alguien que siempre pone su dinero en el caballo que nunca gana, quien lanza sus cartas al azar al aire y a veces, solo a veces logra obtener el número necesario para sobrevivir a sí mismo, y por ende pone sus oportunidades y decisiones bajo un constante giro. He decidió, y me parece mejor que las cosas que haga o diga pierdan la importancia que les di. Este año ha sido bastante difícil, a diferencia del anterior que fue malo, este año me enseño a lucharla, a vencer la adversidad, me enseño que está bien ser un reverendo hijo de puta mientras lo que quieres se consiga con la menor cantidad de bajas posibles, entendí que esta ben tomar decisiones incorrectas si es que estoy listo para cargar con las causalidades, ahora en este momento, puedo decir que aprendí lo suficiente como para decir que, a pesar de todos los obstáculos, mientras la motivación exista, todo puede sobrellevarse, y es que este año estuve motivado por diferentes cosas, el odio, el amor, el desamor, la venganza, la ira, la furia, el deseo de supervivencia, todas estas motivaciones se han mezclado como pintura derramada en el suelo. No tengo el mas mínimo interés en ser una persona buena dulce o correcta, me gusta ser así, misterioso, reservado, críptico y hasta cruel con la gente que no me importa ¿Por qué? Porque realmente me permite filtrar a la gente que quiero a mi lado, a la gente que me importa de verdad.

Aun así, aunque sé que estoy algo equivocado en muchas cosas, creo que la suerte, la inexistente perra que decide quién puede ser feliz y quien no, se aburrió al fin, luego de varios años, de esa constante y ferviente devocion, casi a maltratarme. En este instante y este momento puedo decir que estoy cada vez mas cerca de la extraña estabilidad, tengo un trabajo, que no es el mejor pero es lo suficientemente sencillo como para poder sentarme sentar a escribir este texto mientras las horas de oficina pasa volando, tengo un interés, un deseo carnal y romántico que hace mucho había enterrado bajo la idea de que no valía la pena intentar algo que, a ciencia cierta, sabíamos todos que fallaría como los anteriores, tengo una chispa, casi olvidada que ha resurgido, un súbito interés acompañado por una fuerte inyección de lujuria, tengo además, el respaldo de un extraño grupo de personas, a las cuales no podría querer mas en tan poco tiempo, en este instante, por primera vez en muchos años, tengo la certeza de sea lo que sea lo que pase, haga la apuesta que haga, diga lo que diga, voy a salir entero.

¿Y si no? Volveré a intentarlo con la misma furia que ahora, con la vehemencia impulsada por la lujuria escondía, que si fue despertada ahora, se que incluso ante la posible falla podrá volver a resurgir, por los deseos más silenciosos y escondidos, los que son un secreto para todo el mundo menos para los que los saben, por las palabras que no saben a promesas ni a planes futuros, sino a interesantes ideales. Es hora de darle al mundo en la cara con el dorso de la mano. Fuck it all.

Cosas Rotas







He buscado un espacio entre la constante manía de asfixiarme todos los días entre trabajos, libros, revistas, personas y números para volver a escribir, para darme el gusto de hablar de cosas que nadie quiere leer.


Los días han pasado, no se si con una rapidez inusual o si soy yo el que se ha dejado de preocupar por el tiempo y todo lo que me rodea. En un momento salte de Agosto, arrastrándome por el piso y lamiendo mis heridas a Septiembre, in sensitivo, inamovible casi muerto en la cara del mundo, rebote hacia Octubre donde simplemente vi la vida pasar y me acople a los cambios, revolcado hasta Noviembre donde el peso de todo se hizo mas fuerte y me encontré trabajando, estudiando y con menos tiempo del que quería. Al final el sol empezó a brillar en Diciembre, con menos respuestas de las que me hubiera gustado, pero las preguntas ya no parecían importar, ya no parecía romperme la cabeza con el violento martilleo de las preguntas inacabables.


Y es que durante todos esos meses, las cosas que creí ciertas o que parecían obsesionarme han perdido el sentido, han resbalado de mis manos y se han quebrado en mil pedazos, la constate desesperación por encontrar una razón y un sentido han pasado a ser parte de mi sombra, de mi inconsistente figura y mis incoherentes ideas. El peso de las actividades, proyectos y trabajos que puse sobre mis hombros han terminado por quebrar las obsesiones y manías que antes cargaba alrededor del cuello. No se si es un cambio positivo, no se si es lo mejor o si es lo correcto, peor mis tormentos ya no retumban tan fuerte en mi cabeza, la inconformidad, la desesperación, la impotencia y la incertidumbre han sido ahogadas por el cansancio, el conformismo, el silencio de las noches solitarias y vacías que he aprendido a llenar con sueño, música y libros.


Sin embargo, seria mentir si pretendiera que todos esos pedazos no están guardados en un cajón, escondidos. Siempre fue así, siempre me conforme con cosas rotas y usadas, desde la época en la que mis padres no podían comprarme cosas entendí que ser dueño de algo propio y brillante era demasiado pedir, era un lujo que muy poca gente podía tener, y aparentemente yo no estaba lo suficientemente capacitado o posicionado para tener algo propio. Así que adopte por adaptar mi idealismo a las pequeñas cosas rotas y maltrechas que encontré, no podía al chico de mis sueños, así que tomaría un remplazo, no podía enamorarme de alguien de verdad, así que elegiría estar solo, no podía dedicarme solamente al placer, así que me negaría la búsqueda de placer y el saciar mis deseos carnales, no podía aceptar la derrota, así que simplemente olvidaría el incidente, no podía decir que si, así que simplemente no diría nada. Llevo presentes todas mis decisiones, muestro con orgullo mis heridas, no por que sienta que son motivo de satisfacción sino por que no me importa ocultarlas, por que no veo el sentido en fingir que estoy perfectamente bien cuando soy un material dañado, una cosa rota más.


Escogí a mis parejas cada una mas rota o errónea que el anterior, quizás inconscientemente o quizás por que buscaba desesperadamente ser la otra mitad que solucionara todos esos problemas caóticos que ni ellos ni yo podíamos soportar, pero en la mayoría de casos, quise morder más de lo que pude, y me di de cara contra la pared. En estos meses descubrí que quizás, es mejor dejar de esperar cosas, o dejar de conformarse y simplemente restarle importancia a las cosas. Y es que si siguiera tan obsesionado y caótico como antes, mi mundo se hubiera desmoronado al saber que todas aquellas personas que intentaron tomar el puesto de remplazo dentro de mi inhabitable corazón han tomado caminos divergentes y alejados en su totalidad de mi. Uno se encuentra ahora desfilando en las pasarelas de un antro de mala muerte gay, como la nueva estrella de la noche, el mas nuevo de los travestidos mostrando su carne e invitando a que tengan sexo con el, el otro encontró entre las noches que no pasábamos ocultos en casas ajenas y los momentos que compartíamos haciendo cosas sin sentido una serie de presas a las cuales morder, masticar y devorar, por que el siempre fue un cazador mas capaz que yo, por su parte el tercero de ellos, mi compañero de festividades decidió que, luego de mi insolencia al ocultarle la verdad sobre mi fugaz acto de estupidez con mi ex novio no había mejor manera de saldar las cuentas que ocultarme su correspondiente acto de estupidez con su respectivo ex – novio, un silencio incomodo llenaría la habitación la próxima vez que nos viéramos, tan extraños y tan distantes, pero en el fondo tan iguales, finalmente el ultimo, el mas nuevo y el mas enternecedor, decidió que aun le quedaban rastros de heterosexualidad dentro de si, no se si antes o después de gemir mi nombre y preguntarme cuanto tiempo mas podía quedarme.


El punto es que, los pedazos rotos, de esas fantasías efímeras, se han quedado aquí, escondidos bajo mi cama, llenándose de polvo, ya no cargo conmigo el amargo sabor a derrota e inconformidad, ya entendí -mas o menos- que soy medianamente joven y me voy a equivocar, que hay cosas por las que vale la pena llorar, pero en mi caso, cada vez son mas excusas. Entendí que quizás, la respuesta para los vacios existenciales esta en querer refugiarse en algo de pasión, satisfacción o placer. Entendí muy bien que el amor verdadero de cuentos de hadas en el cual el par de homosexuales bonitos y brillantes contraen matrimonio y tienen una familia probablemente no existe de verdad, y que me hacia falta pisar tierra y aceptar que hay cosas que simplemente duran un instante, un momento, unos días y ya. Entendí que quizás la felicidad no es solo entregarse a una persona, sino a uno, o dos, o quizás tres si es que en el camino uno aprende a cerrar los vacios que hay entre lo que se espera y lo que se desea, entre lo que hay y lo que debería haber, entre lo que se es, y lo que se quiere ser, sin embargo creo que lo mas importante que aprendí en este tiempo es que no esta mal estar roto, no esta mal equivocarse, no esta mal odiarse si es necesario, no esta mal coleccionar cosas rotas, si es que aprendes a mantener tu distancia y no cortarte, en pocas palabras , no esta tan mal ser yo.

La Lata



http://listen.grooveshark.com/#/s/Need+You+Now/2u3dF5


Es aproximadamente las 9 de la noche en un viejo y sucio departamento situado en la Molina, la habitación retumbó cuando Alex azotó la vieja puerta del departamento. La ira y la frustración escapaba de sus ojos y la saliva rabiosa se acumulaba en sus labios. Como una bestia trastornada se deslizo por la habitación hasta que sus ojos se posaron encima del objeto de sus iras.

“¡Tú!”, gritó con furia. “Anda, se un hombre por una vez en tu vida y háblame, justifícate, dime por qué hiciste lo que hiciste ¿Te urgía tanto abrirle las piernas al primer bastardito que se ofreciera a darte una noche de placer? ¿Todos esos planes de matrimonio y familia conmigo no eran suficientes como para controlarte? No, parece que no es nada del otro mundo intentar cumplir una promesa, pero claro, no dices nada ¡Nunca dices nada! Siempre has sido y serás un cobarde, uno más del montón. ¡NO ERAS NADIE! No éramos nadie, éramos un par de niños abandonados en la calle, pero claro, ahora que tienes dinero, gente que te alaba y sexo no necesitas nada de lo que tenias antes, ¿Para qué comprometerte con algo cuando tienes placer? Obviamente una promesa no vale nada, no es justificada, solo importa el placer que te puedan dar, o que puedas comprar, y es que claro nada de lo que yo te di o puedo dar es comparable con un juego de última generación, una noche de sexo, una cena cara o una noche en el cine con todo lo que quieras, el plan de vida, la promesa de matrimonio y familia solo te valen una mierda. ¡UNA PUTA MIERDA, eso es lo que vale para ti ahora, y por eso ME DAS ASCO! No, espera YO me doy asco porque sigo siendo el retardado que te espera todas las noches como si por algún estúpido motivo fueras a volver, como si te fueras a justificar o alguna estupidez así, así que solo te puedo aborrecer, te aborrezco por amarte y verte aquí, porque existes aquí LÁRGATE”.

Con un movimiento brusco su mano golpeó al destinatario de sus gritos. Su frágil cuerpo cayó al suelo, la lata de Coca Cola se rodó por el sucio piso de la habitación levantando el polvo en su camino. Llevaba dos semanas sobre la mesa, en algún momento se encontraba llena pero ahora solo estaba vacía, ella fue mudo testigo del colapso nervioso del joven. Cuando todo empezó el joven de cabello negro aún lo traía corto, se quedó congelado mirando la pantalla, su silencio y su decepción se vieron ahogados bajo el agua de la ducha, tratando de despertar su mente y limpiando la ceniza y la caspa. No derramó
ni una lágrima durante todos esos días, pero consumió mucha azúcar, justificada en la lucha contra la decepción, consumiendo muchas latas y dulces variados. Con el pasar de los días se deslizaba por su vacía habitación solo en bóxers y camiseta, a veces se detenía en la ventana a preguntarse “por qués” que simplemente no existían, preguntas que nadie y ni siquiera él podía responder.

Mientras los días pasaban y el polvo se acumulaba sobre la ropa tirada en el piso, y mientras los cigarros se apagaban en la ventana sus ojos se mantenían clavados en la pantalla. Intentaba producir algo pero nada salía, el bloqueo entre sus emociones y su cerebro era tal que se había vuelto laxo, débil, como una paloma atropellada y dejada a morir. Los días seguían pasando y él pasaba horas escuchando música, pensando planeando, deseando cosas que no podía obtener y no podía controlar. Al empezar la segunda semana su cabello ya estaba largo y desordenado, sus ojos se habían pronunciado y su paciencia se había acabado, ya no podía quedarse más días dando vueltas sobre su cama. Los días pasaron y el empezó a salir, a abandonar la habitación y tratar de quitarse el polvo de encima.

Mientras la noche y el día daban vueltas por la ventana, la lata se mantuvo sobre la mesa hasta el día en el que el joven volvió con la herida abierta, no en la piel pero si en el pecho, la rabia y la impotencia de no poder hacer nada, de no poder cambiar nada. Su cabeza se había transformado en una montaña rusa, y aunque él contaba con la vocación de cambiar cada uno de sus terrores y desesperaciones, el cuerpo no podía, el alma no resistía el peso de los fantasmas. La lata fue aplastada por la rabia y el descontrol. Su cuerpo se desplomo sobre la cama, y su cabeza dio vueltas contra la almohada. El miedo de vivir solo no está en estar solo, es estar en no poder combatir o convivir con los fantasmas, todo el mundo habla de superación y aunque uno quiera superarse la mente a veces es más fuerte que la voluntad. Así que así, aun con el deseo de transformarse se dio por vencido ese día, el corazón roto y la mente torcida logró más que su voluntad y espíritu.


Semanas después, si la lata aún estuviera sobre la mesa o en la habitación se sentiría orgullosa de haber sido el motivo de inspiración para que aquel joven enloquecido pudiera volver a escribir.


-------------------------------------------------

Este es el texto introductorio de una historia corta que estoy planeando. Denme su feedback porfavor. Como notaran tiene mucho de autobiografico

Los Problemas de Alex



Lets hope you never leave old friend
Like all good things on you we depend

Es por la mañana cuando caigo en cuenta de las dificultades con las cuales tengo que combatir. Cuando aun con el sueño en la boca y la cabeza tengo que darme cuenta que hay muchas cosas que hacer.

Estoy sentado en la oficina en la cual trabajo desde el día de hoy, y probablemente trabaje por un año mas, el sueño me vence con facilidad mientras el sol se filtra por las persianas en la ventana. El primer problema es que me estoy cayendo de sueño, no por que no durmiera bien, sino por que los nervios y la ansiedad por hacer todo bien le podían mas al cansancio de mi cuerpo, la segunda y gran dificultad es que las capacidades culinarias de mi madre son un desastre casi fatal, y por ende, el almuerzo que tengo en mi mochila parece una especie de abominación que cobrara vida en cualquier momento como para atacarme. La tercera, y esta probablemente es la que mas me afecta en todos y cada uno de mis vicios, es que tengo prohibido el acceso a Twitter y Facebook, y obviamente a MSN. La cuarta amenaza, y aquí ya nos ponemos algo mas dramáticos, es que tengo una serie de achaques dignos de una anciana, mucha, pero asi, mucha hambre y el prospecto de las clases hasta las 10 de la noche atenta contra cada uno de los vestigios de mi sanidad.

Pero somos fuertes, o al menos eso dicen y allí vamos, con hambre y sueño cual buen marginado por la sociedad a hacerle frente al universo y tratar de no caerse de cara contra el mundo. O eso digo ahora por que probablemente me arrastre a al cafetería mas cercana a inyectarme café en la vena. Sobrevivir sobre todas las cosas. Incluso a ti mismo~

La Pregunta



¿Quién eres?


Muy poca gente se hace esa pregunta, bueno, generalmente se la hacen a algún extraño o a la voz que no reconocen en el teléfono, pero son muy pocos quienes se plantan frente al espejo por la mañana y se preguntan ¿Quién eres?

Yo soy Alejandro, pero hace mucho abandone ese nombre. Soy Shin, el chico de internet que habla de videojuegos, animes y cosas friki. El chico que siempre se ponia firmas Yaoi, el fanatico del Shotacon, el que siempre tiene algo que decir sobre alguna serie. El High Priest molón que dirigía una guild en Ragnarok Online, el que curaba en las Instances de World of Warcraft y el que trata de no morir mas de 4 veces en League of Legends. Soy Alex, el estudiante de Comunicación Integral en ISIL, el que hace planeamientos estratégicos de comunicación, estrategias de marketing, manejo de redes sociales. El que toma fotografías todos los días que puede, el que se enamoro de su carrera aunque tenga uno que otro problema con algunos cursos, el que aunque odia al profesor de diseño sueña con diseñar mejor que nadie. El que se pelea con los Insight del consumidor pero se enamora de cada estilo de publicidad diferente. El que soñaba con ser Relacionista Público pero acepto su destino como Asesor.

Al final solo soy Yo. El chico que se enamoro perdidamente de alguien que hace mucho dejo de existir, aquel chico que siempre hace comentarios agrios y tiene cara de ser un niño bueno que se porta mal. El que es cínico y mala onda con todo el mundo, pero que cuida a sus amigos como si fueran su más grande tesoro. El que estudia pero parece que no lo hiciera por lo flojo y des preocupado que es, el que siempre acompaña todo con una Coca Cola y fuma cuando esta enojado o en parciales. Soy el que tiene miedo pero aun así se arriesga a hacer todo lo que tiene que hacer, que aunque lleva el corazón roto bajo la ropa, clava una mirada desafiante en el futuro.

El dolor y el sentimiento de decepción, la obsesión y todo el resto de cosas malas sobre mi me hicieron olvidar quien era, que era lo que quería y por que lo quería. De a pocos, empiezo a recordar mis sueños propios, dejo que la ambición me susurre al oído de nuevo. No por no ser famoso o popular, no significa que no sea nadie aun. La época en la que no existía ya quedo muy atrás, el futuro esta abierto a posibilidades que no puedo ni imaginar, el mejor momento para empezar algo es cuando lo has perdido todo.

¿Quién soy? Soy aquel tipo que nunca esta satisfecho, el que le dice al destino “púdrete” y se para de frente contra la adversidad. El que es feliz con ser un bicho raro en el mundo, el que siempre termina rodeado de putillos con los que nunca se acostaria y a los cuales desprecia por su estupidez y falta de objetividad. Soy el chico que quiere cambiar el mundo, y esta dispuesto a quemar a todo aquel que se atraviese en su camino.

La defensa de Rosario

Inspirado en mis propios temas de injusticia personal

En general, los hombres juzgan más por los ojos que por la inteligencia, pues todos pueden ver, pero pocos comprenden lo que ven.

 Maquiavelo acierta en uno de sus pasajes con la descripción de cómo cada uno de los humanos termina cediendo hasta cierto punto a los instintos e ideas que tienen por encima de lo que la lógica que maneja. 


¿Qué ocurre con gente que aun no tiene un proceso completado? 


Rosario Ponce ha sido lapidada de manera brutal por diferentes medios, y eso es algo que todos comprendemos. No hay manera aparente de lograr que el publico deje de verla como la asesina publica numero uno de Perú. La primera en su clase y ojala la última de las asesinas culpadas en vano. 


¿Por qué deberíamos defender a Rosario Ponce? 


Es lo legalmente correcto, es lo que la corte Interamericana de Derechos Humanos señala como adecuado para proceder frente a la problemática que presenta Rosario. Cuando no es posible limpiar la imagen de Rosario lo más adecuado es que la imagen del resto de implicados.


 Las armas se deben reservar para el último lugar, donde y cuando los otros medios no basten. 


¿A quienes atacar?


 • Al Doctor Ciro (Circo) Castillo 
• Al difunto Ciro 
 • A la prensa


 ¿Qué estrategias tendría que utilizarse? 


La principal estrategia consistirá en desprestigiar a los adversarios y a los medios Continuando con un refuerzo a la imagen de Rosario y acciones legales.


La despedida

Te escribo esto por que hace exactamente un año dejamos de hablar por primera vez. Cuando me entere que nuestra relación no estaba funcionando y que había alguien mas en tu vida, que ya no me amabas y que todas las cosas que había hecho te habían hecho demasiado daño como para seguir conmigo, llore por días, noches y me odie tanto hasta el punto de querer matarme por el peso de mis errores, pero no te escribo este mail para contarte algo que ya sabes, eso seria estúpido.

Te escribo este mail, que quien sabe, puede ser el ultimo, para decirte las cosas que se quedaron atoradas en mi garganta mientras no me decías absolutamente nada, por que quizás, quiero hacerte pensar o no lo se, quiero que pienses en mi un poco mas, que me tengas grabado en tu cabeza como una especie de fantasma. ¿Sabes que es difícil? Es difícil hacerme a la idea de que luego de tenerte de vuelta te vas de nuevo, de que todo vuelve a nada, es terriblemente pesado hacerme a la idea que tal vez no fui lo suficientemente bueno para ti ¿Tienes idea de lo difícil que es para mi, pensar en que jamás te toque y probablemente nunca pueda hacerlo? El sentir que no pude satisfacerte y al final necesitaste de alguien más que te tocara y te hiciera sentir bien.

Es cierto, estoy triste, pero no estoy tan deprimido como creí que lo estaría ¿Sabes por que? Por que aunque me decías que me amabas muchísimo yo no te sentía completamente mío, no por que tuviera que compartirte con un extraño y con tus amigos, sino por que siempre te sentí diferente, te sentía extraño, vacio, lejano, has cambiado y te has vuelto tan distinto Daniel ¿Eres feliz así? ¿Te gusta mentir y ser cobarde como para no hablarle a quien se supone que amas más que a nada? ¿Te sirve ser materialista y escapar de tus problemas? No soy nadie para juzgarte ni decirte nada, quizás estas mejor así, o quizás no, eso solo lo sabes tú.

Dime ¿Puedes dormir al final del día? ¿No te pesa siquiera un poco en tu conciencia el peso de todos los sueños rotos que cargas en la espalda? Por que espero que recuerdes, que no solo tu tienes sueños, que recuerdes que teníamos planes, ideales, metas, cosas que simplemente no se hacen de la noche a la mañana pero se cuidan y se protegen hasta que puedan crecer y volverse realidad. Cosas como tu promesa de dejar a tu novio (con el cual ya cumpliste un año, y me parece apropiado felicitarte) o ayudarnos a terminar nuestras carreras. ¿Cómo es que tu vida logra seguir como si nada, si me amaste tanto? ¿Cómo logras que no te haga falta cuando no hablamos? ¿Por qué te tragas todo y no dices nada? No entiendo por que pusiste una pared entre tu y yo, si mas que nadie sabes, que nada de lo que pudieras decir o hacer haría que te dejara de querer como te quise.

Pero la decepción es grande que todo el amor incondicional que tengo, y no viene de que me mintieras y te acostaras con alguien mas, que son cosas que me duelen si, tanto en el orgullo como en la imagen que tenia de ti. Lo que mas me duele y me decepciona es saber que no intentaste ni siquiera la mitad de cosas que dijiste. Cuando amas a alguien, como nosotros nos amamos, ni el tiempo ni la distancia, ni siquiera la gente importa, solo sigues, y sigues adelante por que quieres ser feliz, con esa persona , y no se que paso, o cuando se perdió todo eso, pero ambos sabemos que las cosas ya no eran así.

Te escribo por que aun te amo y lo hare por un tiempo mas, y te extraño y lo seguire haciendo quien sabe cuanto tiempo mas, y me duele de maneras que ya no recordaba, siento que es importante decirte todo esto por que nunca tuve nada que fuera mío hasta que te tuve a ti, por que fuiste lo único y lo primero que importo. Pero te escribo también para decirte que no es justo seguir así, no es justo para mi por que ya llore y sufrí suficiente, por que prefiero odiarte en silencio que sentir esa horrible sabor amargo en mi boca por que no eres mío, por que no me amas como me amabas y quizás es mi culpa o quizás no, por que no quiero ni puedo soportar mas la idea de que no puedo tocarte ni sentirte pero alguien mas, a quien no se si amas puede, y lo seguirá haciendo por todo el tiempo que quiera. Es cierto, las palabras no importan mucho a veces, pero cuando los actos van en contra de las palabras y ni siquiera te queda la seguridad de que un “Te amo” es sincero entonces ¿Qué queda? Ya no nos quedaba nada Daniel, ni tiempo, ni recuerdos, ni ganas.

Si alguna vez me vuelves a buscar, lee esto antes de hacerlo, lee con detenimiento cada uno de los párrafos que están aquí, las palabras, las letras. Lee todo e imagínate lo mucho que llore y las horribles ganas de arrancarme la piel para ver si así podían pensar en algo más, no dudes ni por un segundo que te extraño y siempre serás el amor de mi vida, incluso cuando ya no te ame. No escasees en lagrimas cuando intentes ponerte en mis zapatos y pensar en lo dolorosa que es esta carga para mi, piensa en lo mucho que me cuesta irme aun mas lejos de ti, imagina lo complicado que es ignorar a la parte mía que quiere lanzarse al piso y rogarte que me ames, imagina las voces en mi cabeza que no saben que hacer, y si puedes, imagina que me amas como me amabas antes de que yo rompiera tu corazón.

Adios

You made promises you couldn't keep

No me dejaste decirte adiós, ni siquiera supe si era el momento indicado para decirnos adiós, solo supe que te fuiste, y dejaste de hablarme como si fuera un extraño en tu vida, como si fuera un grave error. No pude pedirte explicaciones y aunque trato de odiarte por lo que hiciste no puedo hacerlo.

Volviste a estar allí, sin decir nada, como al inicio cuando aun no estaba envenenado por esos sentimientos que ahora siento tan inútiles y vacios, tan envenenado por ellos como por cada uno de los cigarros que fumo en la noche para evitar pensar en todo lo que pudo ser y lo que probablemente nunca será ahora.

No puedo hacerme a la idea de que todo lo que dices no significa nada, no entra en mi obsesionado cerebro que esta vez no mereces ni mis palabras. No te hablo por que fuiste tu el que así lo decidió, o quizás simplemente no lo hago por que creo que si te hablo me va a doler mas de lo que me duele el sentir que no eras la persona que yo creía, que quizás no me amabas tanto como decías. Abro tu ventana esperando que digas algo, que te expliques que pidas disculpas, que todo cambie, que todo sea como antes de que nos hiciéramos tanto daño y cada uno tomara un camino diferente, que por lo menos me vuelvas a decir que me amas y que te espere, pero ¿para que? Si eso no va a pasar, si tú no quieres ser la otra mitad de mi sueños, o si lo quieres, no quieres pagar el precio que hay por ello.

No puedo creerte, no quiero hacerlo, no pienso ver lo que haces o quedarme mirando tu ventana todos los días a ver si me dices algo, por que se que sigues tu vida, se que a pesar de toda la rabia y el enojo que tengo revolviéndose en mi estomago no puedo decirte todos los insultos y maldiciones que quisiera por que eres tu, y siempre serás tu, la persona que despertó un mundo completamente nuevo en mi.
Nunca espere que al final todo me sabría a mentira, por que, creía que mientras yo no te mintiera tu no lo harías. Pero no fue así, y quizás si te mentí, te mentí cuando dije que no quería amarte más, que ya no sentía nada por ti, por que es mentira, y no es secreto para nadie que no es verdad. No quiero volver a tenerte lejos, no quiero saber que amas a alguien más, no quiero soportar de nuevo el doloroso trámite de hacerte a un lado, no quiero tener que acostumbrarme al sabor de otras palabras, al sentimiento de remordimiento al acostarme con alguien que no seas tu. No te entiendo, no te perdono, no te comprendo, no te conozco, no te odio, no te dejo de amar, no dejo de pensar en ti, no me acostumbro al ahora, no se que pasara, no se a donde iré, no hago nada, no se quien soy.

Y si me dicen que me merezco algo mejor, si me dicen que nunca me amaste, si me dicen que nunca exististe, si me dicen que debería odiarte, lo único que diré es, no lo se. Así como tampoco se si por todas las veces que te dijeron que lo que tenias era lo correcto empezaste a creer que yo no era suficiente. No lo se, no lo quiero entender, no se ni por que escribo esto, pero hay una cosa que se, y que nadie me puede quitar de encima, tenga que ver o no con todo lo que pasa, paso o pasara, la única certeza que tengo, es que hace mucho tiempo, que no soy feliz.

Lo mucho que te ame

Entre la segunda cajetilla de cigarros y la decima repetición de “Bohemian Rhapsody” me pregunte por que luego de dos semanas sin hablar y de enterarme de cosas tan dolorosas no había soltado ni una sola lagrima, no me había lanzado a la cama a arrancarme los cabellos o pensar en que hice mal esta vez.

Me di cuenta que lo mucho que te ame no te fue suficiente para evitar que me mintieras y volvieras a la cama de alguien mas, no alcanzo para recordarte tus promesas y tu presunto odio hacia las mentiras. Lo mucho que te ame no sirvo de nada ante la gran cantidad de cosas que habías puesto ante tus prioridades, fue inútil ante tu nueva personalidad y tus nuevos intereses, no te satisficiste con todo lo que te ame, por que no era material, por que no lo podías tocar, por que ya no lo sentías. Y aunque lo intente y quise que fuera fácil para ti ser parte de mi vida al parecer nuevamente no fui lo suficientemente como para que nuestros caminos se volvieran a unir.

Lo mucho que te ame tampoco fue suficiente para llenar el espacio entre lo que nos amamos y la realidad, entre tus palabras dulces, entre las canciones que te hacían pensar en mi y en los días que te olvidabas de mi. No fue suficiente para hacer que me extrañaras tras dos semanas de silencio, o vergüenza, provocado, tal vez, por que no te basto en ningún momento todo lo que quise hacer por ti, y preferiste nuevamente a alguien de verdad. Tampoco basto que te amara tanto como para crear castillos imaginarios juntos ni bien tuvimos la oportunidad, así como mi ciega fe en ti y mi amor por tus sueños, mi apoyo incondicional no valia nada al lado de un nuevo objeto que pudieras obtener.

Todo lo que yo te ame, no fue motivo para que no dudara de ti, y sin embargo, lo mucho que te ame fue mas que suficiente para que no creyera lo que todos me decían, que era cierto que no eras nada diferente a los demás, que nunca dejarías a la carne, por que era lo que necesitabas, que la distancia podía mucho mas que un amor de colegiales que hace mucho dejaron de ser niños, que solo era una pieza mas en el juego al que jugabas para ser feliz.

Lo mucho que te ame, entonces, no sirvió para que me respetaras, tampoco fue suficiente para que cumplieras tus promesas y no me mintieras, no sirvió para evitar que al primer momento de debilidad volvieras corriendo a acostarte con alguien a quien jurabas no amar, lo mucho que yo te ame tampoco significo nada cuando preferiste correr de mi y hacer de cuenta que no existía durante varios dias, todo sea para no pelear, si amarte tanto no sirvió de nada contigo ¿Entonces para que intente hacerte feliz? Aunque no sirvió de nada amarte y ponerte en la cima de mi apocalíptico mundo de nuevo, me sirvió para darme cuenta, que nuestro tiempo ya paso, que amarte no tiene sentido, si tu no vas a intentar amarme igual, que aunque me duela, no eres el hombre que decías ser, y sobre todo, que ahora que todo se quedo en el aire, y no tuviste ni el coraje para poder decirme adiós, ni la valentia para pedir perdon por la enorme decepcion en la que te transformaste, me doy cuenta que ciertamente, ya no eres para mi.

Así que dile adiós a nuestra casa imaginaria con dos perros y supuestos hijos, a nuestros deseos de vivir juntos y ayudarte a estudiar lo que querías, a nuestras conversaciones de improviso cuando necesitabas alguien que te entendiera, o aceptara, dile adiós al chico que todo lo dejo por ti, incluso el orgullo y la dignidad, despídete de quien hasta el final cuando era obvio que mentías siguió creyendo ciegamente en ti. Dile adiós, a lo mucho que te ame.

Espasmo.

De una manera u otra, cada vez que me siento a escribir, encuentro alguna historia triste y complicada en mi cabeza. Una serie de resonancias, ecos y alaridos desde el fondo de mi ya cansada y perversa mente, historias que no hacen sino reforzar la imagen de ser melancólico y abofeteado por la vida, que con toda certeza y derecho, me he ganado.


Es cierto, soy un hombre triste, frustrado por sus acciones y su entorno, mezquino y sádico, ambivalente y bipolar, soy una especie de colección macabra de hechos, recuerdos, defectos y enfermedades. Pero es cierto también que soy un soñador, un humano idealista que busca y anhela con un fervor casi ridículo la redención de su espíritu y la materialización de sus locas fantasías de colegial, fantasías que como diría uno de mis mentores, se dieron cuando aun era feliz e indocumentado, pero que conservo con una ridícula templanza.

El tiempo ha sido cruel conmigo, así como yo he sido cruel con las personas que el tiempo coloco en mí camino y a su vez otro tanto de personas fue brutal con mi nada inocente persona. Los días se volvieron semanas y los cigarros sueltos pasaron a ser cajetillas, mis bolsillos dejaron de estar llenos de monedas y caramelos, lentamente pasaron a ser el hogar de mi encendedor de turno y un poco de tabaco mentolado. Mis amigos dejaron de ser los mismos, y yo deje de ser el chico del cual se hicieron amigos, mis amores se fueron por un barranco, y con ellos parte de la sonrisa a medias que usaba cuando hablaba de ellos, mis noches y tardes se hicieron mas vacías, pero el humo y los pensamientos entre suicidas y optimistas llenaron esos vacios.

No me siento exitoso ni realizado, tampoco puedo decir que soy feliz, por el contrario estoy casi todo el tiempo frustrado y enojado. Aunque me siento satisfecho con lo que ha hay un sinfín de cosas que se que están mal en mi vida, hay un millón de ideas en mi cabeza a las cuales quiero transformar en realidad, una innumerable cantidad de sueños y fantasías que quiero desechar o volver realidad, y a pesar de mi carácter soberbio y radical, mis miedos y dudas a veces pueden mas que mi seguridad. Mi personalidad es así, monstruosa y autodestructiva, aferrándose a vicios y malas costumbres para sobrevivir.

A donde quiera que valla sigue siendo un misterio, solo se que me queda un año y medio para preparar mis maletas y largarme hacia algún futuro incierto. Muchas puertas se han cerrado, y con ellas los futuros inciertos que albergaban, sin embargo, en algún país lejos de aquí encontrar un lugar en el cual estacionarme, con quien venga o a donde valla, el futuro no me asegura nada, nunca lo hizo y no empezara ahora, y aunque tenga que tomar las decisiones dolorosas o difíciles, y tenga que tirar por la borda el puñado de cosas que me quedan, no hay mas opción que esperar por que mañana todo sea por lo menos, un poco menos complicado que hoy.

Gracioso

Es gracioso, o al menos eso dicen, la manera en la que una sola persona cae en una obsesión por un sentimiento o persona. La gente espera que uno sea fuerte avance con su vida, que deje todo atrás, que el silencio. Nadie te enseña a no mirar atrás y a ser fuerte. Es algo que se va dando con el paso del tiempo, de la vida. Aprender a ser fuerte radica en aprender a caerte y darte contra el piso una y otra vez, lanzándote al suelo y rasgándote la cara.

La gente cree que eres gracioso cuando haces bromas y respondes sarcásticamente a todo, creen que estas bien, que eres el señor perfecto y nada malo puede pasar. Pero esa no es la verdad, no hay nada gracioso en lo que te pasa y en lo que sientes, no hay nada gracioso en caer lentamente en la locura. Te has vuelto un hombre extraño y cansado, consumido por tus miedos e inseguridades ¿Sabes qué pasa con estas situaciones? Todo lo que te pasa te cambia, desde adentro, desde el fondo, tu cuerpo solo tiembla y se debilita más con los años. ¿Hace cuantos meses que sigues dando vueltas sobre tu cama esperando que las cosas mejoren? ¿Desde cuándo crees que tu vida se escapa de tus manos? ¿Te parece gracioso ahora? ¿Te parece bien lo que pasa contigo ahora?

Te enamoraste, y eso era lindo y gracioso, te ilusionaste y te dedicaste una y otra vez al desesperado sentimiento de ser feliz. ¡Y eso si que era gracioso! El correr detrás de un hombre al que no puedes tocar con los ojos cerrados y el alma atada a una enorme piedra que te hunde lentamente en un océano de complicaciones. Es gracioso ahora que lo piensas ¿No? Como usaste a uno y otro de los chicos que pasaron por tu vida, como te dedicas a encontrar en pieles ajenas algo que jamás podrás remplazar, pero es algo que jamás probaste, que jamás sentiste. ¿Qué no te parece divertido? Claro que lo es, claro que eres un ser gracioso y patético atado a un montón de convicciones.

Estas enamorado y loco por un hombre que no sabes si te ama aun, eres un ser desesperado por obtener el amor y la aceptación de alguien que quizás ya te acepto, o quizás no, has buscado con tiempo y perseverancia el obtener las cosas que perdiste y que te arrancaron de las manos. Es gracioso ¿No? Como incluso cuando las cosas parecen avanzar, retrocedes, como luego de tantos años aun no aprendes que no puedes salir de ese círculo, de el continuo daño entre tú y el, de la caída en picada de tus ideas. Ahora estas aquí, en una silla fría frente a una pantalla, escribiendo las cosas que no puedes decir, esperando a alguien que quizás no venga, soñando despierto con la posibilidad de entregarte ciegamente a un amor que se escapa de tus manos.

Deberías estar feliz ¿No? Tienes lo que quieres, pero no lo tienes como quieres, te han dado lo que pediste pero no puedes tocarlo, te han vuelto a decir las cosas que querías escuchar solo que suenan mas vacías que antes. Si deberías estar feliz ¿Por qué lo único que haces es llorar? ¿No te parece gracioso? Pero si es sádicamente divertido ¿Cuántos días más vas a morder tus uñas esperando que todo se soluciones? ¿Cuánto tiempo más llevaras el peso de tu locura y tu desesperación ligadas a tu frustración y el ideal que vuela en el aire, dispersándose en el infinito? ¿Cuántos “Te amo” mas vas a tener que tragarte para esbozar una sonrisa?

En Todas partes

Te busque desde que te fuiste. No te encontré en ningún lugar. Pensé escuchar tu voz en la puerta de mi habitación. Creí ver tu reflejo caminando en las mismas calles que yo. No eras tú. Estabas en todas partes, en la boca de los demás, en mi memoria, en el centro de mi corazón, en una lata de Coca Cola a medio terminar, en mis cigarros que buscaban llegar hacia ti. Estabas en mi mente, desde la mañana hasta el anochecer, te busque en el cuerpo de alguien más pero no te encontré, busque tus palabras, pero no te pude entender, no entraba en mi cabeza o mi corazón las razones por las cuales ya no estabas aquí.

Camine por malecones vacios, estabas en el mar, y no te podía encontrar, estabas en el viento de verano que jugaba con mi cabello, estabas en imágenes que me recordaban a lo que fue y nunca debió dejar de ser, estabas en el color purpura que tanto te gustaba, en el rojo de mi sangre que me movía, en el azul que me recordaba tus paredes, en el verde de tu bandera, en el blanco de una página en blanco, esperando un correo tuyo, en el negro de la ceniza en mis pies, en el naranja del peluche con el que dormías, estabas en todas partes, menos aquí, junto a mí.

Te quise encontrar en labios ajenos, pero el vacio seguía allí. Mi habitación aun tenía un espacio guardado solo para ti. Jugaba a las escondidas con mis sentimientos por ti, un día los aceptaba y buscaba con desesperación, al otro solo quería correr de ellos y ocultarme lejos. Me hundí entre mis inseguridades, miedos, desesperación y furia. Di vueltas buscando una línea, una señal en la que estuviera una parte de lo que tuvimos, de lo que tanto anhelaba.

En el momento en que mi cabeza y mi corazón se dieron por vencidos, entre el humo de los cigarros y el dolor de cabeza, pensé en guardar para siempre las esperanzas de volver a verte. La culpa y la tristeza serian las cadenas con las cual aseguraría dejar atrás todo lo que tenía que decir. Con la cabeza mirando al piso y los ojos cerrados creí que era un buen momento para prenderle fuego a todo.

Y cuando deje de buscarte te encontré. Estabas en todas partes y ahora estabas aquí, junto a mí, rompiendo las ventanas y recordándome que aun existía algo por hacer. Estas en todas partes y ahora estas aquí, para mí. Es mi turno de llegar a todas partes y lograr estar junto a ti, de reparar cada una de las cosas que se rompieron en el camino. Ya no importa nada mas. Te amo mas de lo que puedo describir, ahora sin cadenas y sin miedos te lo puedo decir, sigues en todas partes, y ya estas donde siempre debiste estar, a mi lado.

Volver

Cuando era niño, soñaba con volver a la época en la que mis padres no se peleaban todos los días, a los días en los que mi abuela aun no estaba enferma de un cáncer terminal que la arrancaría de mis manos antes de que fuera el momento indicado. Todo el mundo quiere volver a algún lugar, regresar a algún tiempo, a algún lugar, pero la verdad, es que nadie tiene a donde regresar.

Todo lugar precioso, todo recuerdo preciado no es más que eso, un recuerdo. Incluso volver a un lugar no es la misma experiencia, al volver a donde sea, las personas, el ambiente, el aire, los colores, todo es diferente. Volver a la habitación donde jure amor eterno y verla ahora, vacía, vieja, sucia, sola, es solo un reflejo de cómo cambian las cosas.

Claro, probablemente todas estas palabras no son más que el delirio de una persona que se ha aburrido de todo y se ha decepcionado de casi todo lo que le rodea. Soy una persona que eligió suicidarse de a poquitos, de cigarro en cigarro, en silencios prolongados donde demuestra su estupidez y su falta de temple, una réplica de la persona que juro jamás dejaría de ser, pero estúpido y todo, se dio cuenta que el tiempo es cruel, que cambia todo, a las personas, los lugares, los sentimientos, las caras, la vida.

Llevo mucho tiempo pensando en que me gustaría volver a donde estaba, con quien estaba, en ese momento en el que todo estaba bien, pero hace poco me pregunte ¿Qué me asegura que hay donde volver? ¿Quién me da la seguridad de que todo sería como antes? Nadie te da ninguna seguridad, pero así es todo en esta vida. Las promesas, los ideales, todo son un juego de azar.

Dije que no volvería a escribir, pero a veces uno no puede evitar volver ¿No? Algunas personas no pueden evitar lastimar a otras una y otra vez, volver a mentir, volver a hacer daño. Incluso entrar a mi habitación implica volver a algo que ya no es lo mismo, la cama teñida del aroma de alguien más, mi ventana llena de cenizas, mi espejo cada vez más gris, y mi reflejo cada vez menos parecido a mí.

Rompí mi palabra, quebré mis votos y destroce mis ideales. Esto es lo que hay ahora, un poco de todo lo que se quedo a medias y mucho de nada. Una historia inconclusa, un sentimiento que se desvanece, las cenizas de la esperanza de encontrar un “Te amo” escondido entre palabras sin sentido, el punzante dolor de la espera disolviéndose. Ahora estoy aquí, mirando a todas partes sin saber hacia donde caminar, no sé si es porque asimile que las cosas no volverán a ser lo que alguna vez fueron jamás, o si entendí que ya no hay donde volver.